¿Estás pensando en mudarte de casa y te sientes abrumado por todo lo que hay que hacer? No te preocupes, con una buena planificación y organización puedes hacer una mudanza sin estrés y disfrutar de tu nuevo hogar. Aquí te damos algunos consejos para preparar una mudanza y que sea fácil y rápida.
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Haz un inventario de tus cosas
Antes de empezar a empacar, haz una lista de todo lo que tienes y clasifícalo por categorías: lo que vas a llevar contigo, lo que vas a donar o vender, lo que vas a tirar o reciclar. Así podrás deshacerte de lo que no necesitas y ahorrar espacio y dinero en el transporte.
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Consigue el material adecuado
Para proteger tus objetos más frágiles y evitar roturas o pérdidas, necesitas cajas de diferentes tamaños, papel de burbujas, cinta adhesiva, etiquetas y rotuladores. También puedes usar bolsas de plástico o tela para guardar la ropa o la ropa de cama. Si tienes muebles grandes o pesados, puedes alquilar un carrito o una plataforma con ruedas para facilitar su traslado.
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Empaca con tiempo y orden
No esperes al último momento para empezar a empacar tus cosas. Lo ideal es hacerlo con al menos dos semanas de antelación y por habitaciones. Empieza por las cosas que menos usas y deja para el final las más esenciales. Etiqueta cada caja con su contenido y la habitación a la que pertenece. No olvides revisar estos consejos para embalar tus cosas en una mudanza.
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Pide ayuda o contrata a profesionales
Una mudanza puede ser muy cansada y estresante si la haces solo. Por eso, es bueno contar con la ayuda de familiares o amigos que puedan echarte una mano con el embalaje, el transporte o la limpieza. También puedes contratar los servicios de una empresa especializada en mudanzas que se encargue de todo el proceso por ti como hacemos en Mudanzas Jaramillo.
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Preparate para el día «M»
El día de la mudanza es importante tener todo listo y organizado para evitar imprevistos o contratiempos. Revisa que no te olvides nada en tu antigua casa, cierra bien las llaves del agua y del gas, desconecta los electrodomésticos y entrega las llaves al propietario o al inquilino anterior si corresponde. Lleva contigo un kit básico con documentos importantes, medicamentos, artículos de higiene personal y algo de comida y bebida para el viaje.
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Dar de alta instalaciones
Una vez que llegues a tu nueva casa, dedica un tiempo a revisar que todo esté en orden y funcionando correctamente: las instalaciones eléctricas, el agua corriente, el gas natural… Después empieza a desempacar tus cosas siguiendo el orden inverso al que usaste para empacarlas: primero las más esenciales y luego las menos usadas.. Coloca cada cosa en su lugar según tu gusto y comodidad.. Y finalmente relájate y celebra tu nueva etapa con una copa de vino o un chocolate caliente.
Como ves, preparar una mudanza sin estrés es posible si sigues estos pasos.. Solo necesitas planificar, organizar, empacar, trasladarte, desempacar y disfrutar.. ¡Ya estás instalado en tu nuevo hogar!
